La cerveza FORST nació en 1857 en la aldea de Foresta, en el municipio de Lagundo (Algund, en las afueras de Merano), de la feliz intuición de Johann Wallnöfer y Franz Tappeiner, de Merano. Este lugar reunía inmediatamente las mejores condiciones para la fabricación de cerveza: agua superlativa que brotaba de los manantiales de los montes San Giuseppe-Josefsberg y Marlengo (1793 m), la posibilidad de almacenar hielo natural durante el invierno, necesario para refrigerar las bodegas excavadas en las rocas en verano, y una carretera cómoda para el tránsito. Josef Fuchs (un agricultor que poseía una oficina de correos), progenitor de la familia que aún hoy posee las acciones, se hizo cargo de ella, con el apoyo de su esposa Filomena, en 1863 con una producción de tan sólo 230 hectolitros al año e hizo construir la primera fábrica de cerveza de Forst en el lugar donde aún hoy se encuentra. Aprovechando su vena empresarial, también consiguió explotar los granos resultantes de la producción de cerveza como forraje para el ganado, siendo propietario de una granja con una explotación ganadera contigua. Josef falleció en 1892 y dos años antes, en 1890, cedió la dirección a su hijo Hans, que aumentó la producción primero a 8.900 hectolitros y luego a 22.500 en 1901. En ese año, Forst se equipó con compresores de refrigeración Linde para refrigerar las bodegas y fabricar hielo. La producción creció así hasta los 64.000 hectolitros anuales en vísperas (1913) de la Gran Guerra.Sin embargo, la llegada de la guerra también afectó a esta cervecería, que vio descender la producción a unos 10.000 hectolitros en 1917. Ese mismo año, Hans fallece y su viuda Fanny toma las riendas del negocio hasta 1933. En 1921, la producción alcanzó los 43.000 hectolitros. En 1933, Fanny deja la dirección a su hijo Luis ("Alois") Fuchs, ingeniero, que la dirigirá durante 56 años. En los años treinta, Forst se esfuerza también por eliminar a los competidores que operan en los alrededores, de modo que se adquieren, por este orden, las cervecerías Blumau de Vilpiano (vendida posteriormente a Dreher), Mafei de Rovereto y Trentina de Castelfondo. En 1948, Forst firma un contrato con los hermanos sicilianos Andrea y Francesco Vesco por el que se concede al Centro Imbottigliamento Siciliano Prodotti Alimentari (CISPA) de Palermo el derecho exclusivo de embotellar y suministrar cerveza Forst en toda Sicilia. En 1955 se adquiere la cervecería Seeber de Sterzing, fundada por Peter Seeber en 1875. Él mismo cambió el nombre por el de Società Anonima Ditta Seeber en 1939 y, como se deduce de una famosa etiqueta en la que aparece un bebedor con casco colonial, y como ocurrió con otras cervecerías en la época fascista, empezó a exportar a África. Tras su absorción por Forst, siguió produciendo hasta 1969. Desde 1991, Forst es también propietaria de la cervecería Menabrea de Biella (empresa que atravesaba grandes dificultades financieras). En este caso, con mucha previsión, se decidió dejar que esta cervecería funcionara con la máxima autonomía. Una decisión que se vio recompensada por el gran reconocimiento que recibió en todo el mundo. En 2010, Margarethe Fuchs, Baronesa Von Mannstein (Innsbruck 1918-Merano 2015), que había heredado Forst a la muerte de Luis en 1989, pasó la mano a su hija Margherita Fuchs (que fue nombrada Caballero del Trabajo por el Presidente de la República Italiana Sergio Mattarella en 2022). En 2011, se inauguró una nueva gran sala de cocción (la quinta, con un sistema especial de cocción a baja presión) diseñada por Stahlbau Pichler de Bolzano. Con el paso de los años, Forst se ha convertido en una de las principales cervecerías de Italia. A día de hoy, es la única cervecería italiana de propiedad familiar. La producción actual se sitúa en torno a los 900.000 hectolitros anuales y, en la actualidad, Forst ha elegido para su planta válvulas de diafragma, separadores y manómetros de ASV Stubbe, que garantizan la máxima fiabilidad y excelentes resultados. Los productos ASV Stubbe se utilizan en la sala de elaboración de mosto dentro de la planta de higienización CIP. Después de más de 166 años, la empresa sigue ubicada en el mismo lugar a ambos lados de la antigua carretera imperial de Merano a Vinschgau.
Generación tras generación, la empresa ha evolucionado hasta convertirse en una de las empresas familiares independientes más importantes de la industria cervecera, que produce especialidades de cerveza de alta calidad. En la actualidad, Margherita Fuchs von Mannstein, junto con sus hijas, la quinta generación de la familia, continúa siguiendo y llevando a cabo la visión de la empresa: un enfoque purista del arte de la elaboración de la cerveza, la alta calidad del producto con pleno respeto por la naturaleza, la proximidad y una relación de lealtad a largo plazo con los clientes, así como una fuerte responsabilidad social y un fuerte vínculo con la región constituyen la base del compromiso de una empresa con profundas raíces locales.
Como empresa de importancia nacional, Forst respalda Birra Castello. La cervecería Forst es sin duda la más bella de Italia (estructuras decoradas con pinturas y balcones de madera que dan la idea de un pueblo medieval), cuenta con tecnología de vanguardia. Recientemente se ha construido una nueva estructura con un sistema de recuperación de energía que garantiza la máxima eficacia en el uso de la energía térmica. Anexa a la cervecería, una hermosa taberna, el Bräustüberl, con cocina tradicional cuidadosamente elaborada, es el punto de encuentro de los fieles aficionados locales de los productos Forst, que se sirven crudos de barril. En verano, se abre un agradable Bräugarten, refrescado por la sombra de los árboles.
